El texto de unas de 19 páginas sobre el acuerdo de comercio
internacional, el denominado anexo de
servicios financieros del TISA (acuerdo de comercio en servicios financieros)
se está elaborando en secreto-y fuera del Acuerdo General sobre el Comercio de
Servicios (AGCS) y del marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC)- fue
publicado por WikiLeaks el jueves. Cincuenta países de todo el mundo ya han
firmado el Acuerdo de Comercio de Servicios, o TISA, incluyendo Estados Unidos,
Australia y la Unión Europea. A pesar de enormes lazos internacionales, sin
embargo, los detalles sobre el acuerdo se han negociado a puertas cerradas y en
gran parte ignorados por la prensa.
Los países que actualmente forman parte de la negociación
son: Australia, Canadá, Chile, Taiwán, Colombia, Costa Rica, Hong Kong,
Islandia, Israel, Japón, Liechtenstein, México, Nueva Zelanda, Noruega,
Pakistán, Panamá, Paraguay, Perú, Corea del Sur, Suiza, Turquía, Estados Unidos
y la Unión Europea, que incluye sus 28 Estados miembros: Austria, Bélgica,
Bulgaria, Chipre, Croacia, República Checa, Dinamarca, Estonia, Finlandia,
Francia, Alemania, Grecia, Hungría, Irlanda , Italia, Letonia, Lituania,
Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Rumania, Eslovaquia,
Eslovenia, España, Suecia y el Reino Unido.
EE.UU. y la UE son los principales impulsores del acuerdo y
los autores de la mayoría de los cambios. En una maniobra significativa para
impedir la transparencia, el proyecto ha sido clasificado para mantenerlo en
secreto no solo durante las negociaciones, sino durante cinco años después de
la entrada en vigor de TISA, explica el portal en
su página web.
WikiLeaks explica que a pesar de los fallos evidentes en la regulación
financiera durante la crisis financiera global en los años 2007 y 2008, y las
llamadas a mejorar estructuras reguladoras pertinentes, los defensores de TISA
pretenden desregular aún más los mercados de servicios financieros globales.
Estos gobiernos estaban celebrando estas conversaciones fuera de los límites
formales de la Organización Mundial del Comercio (OMC) con los ojos puestos en
TISA. Se llamaban a sí mismos "realmente buenos amigos de los
servicios" y su objetivo es convertir TISA en la nueva plataforma de
servicios financieros. El informe destapa los deseos de EE.UU. de
establecer nuevas reglas de negociación en TISA, obtener suficientes países que
lo firmen para luego poder incorporarse a la OMC, y luego tener las mismas
normas que se adoptan para las negociaciones en la OMC.
WikiLeaks explica que no está claro cómo debería suceder esto: bien dos
terceras o tres cuartas partes de los miembros tendrían que estar de acuerdo
para aceptar TISA bajo el paraguas de la OMC o bien bajo un acuerdo
plurilateral. Países como Brasil y la India han sido muy críticos con TISA, y
EE.UU. no ha permitido a China unirse.
EE.UU., a la cabeza del manejo de datos
El mayor peligro es que TISA impedirá a los gobiernos imponer normas rigurosas
relacionadas con el sector financiero. Además, buscan no permitir que los
gobiernos puedan solicitar datos para procesarlos y almacenarlos localmente, sino en las nubes, y
la mayoría de empresas que usan esta tecnología se ubican en EE.UU.
Empresas estadounidenses también dominan el sector de la información y las
comunicaciones en general. El derecho a guardar datos extranjeros es
especialmente importante para el sector financiero, explica WikiLeaks, porque
las finanzas son datos. Las industrias de seguros y tarjetas de crédito de
Estados Unidos han sido las que más protestaron en contra de las solicitudes de
"localización" de datos.
La propuesta de EE.UU. es mucho más directa, pues quiere que cada proveedor de
servicios financieros de TISA tenga derecho a transferir información en forma
electrónica o de cualquier otra manera hacia y desde el territorio de otro
miembro de TISA para el procesamiento de datos. El portal reitera que en tales
condiciones no se puede hablar de "ninguna pretensión de derecho para el
Estado para proteger la privacidad y los datos personales".
Expansión de las multinacionales financieras
El borrador del Anexo sobre Servicios Financieros pone de relieve las normas
que podrían contribuir a la expansión de las multinacionales financieras —con
sedes ubicadas, sobre todo, en Nueva York, Londres, París y Frankfurt— a otras
naciones mediante la prevención de las barreras regulatorias.
Regulación financiera, ¿objetiva e imparcial?
EE.UU. aspira a que toda la regulación financiera se administre en una
"manera razonable, objetiva e imparcial". Pero, explica el portal,
son criterios "altamente subjetivos y proporcionan un terreno fértil para
la competición y si es necesario una disputa".
La presión sobre los reglamentos, que se realiza a través de argumentos y
estudios y exigiendo explicaciones, se ve reforzada por las solicitudes de
consulta con correspondientes estados patronos y, si es necesario, advertencias
de una disputa. "El objetivo claro es 'calmar' o sofocar al
regulador", sostiene.
Secretismo antidemocrático
El secretismo durante la negociación sobre un tratado comercial de carácter vinculante y ejecutable es "objetable y antidemocrático, y provoca decisiones mal informadas y sesgadas", sostiene WikiLeaks. De hecho, este secretismo tiene como objetivo prevenir que los gobiernos sean responsables ante sus parlamentos y ciudadanos.
La supresión de los documentos de referencia también crea problemas legales. La Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados reconoce que son una herramienta esencial para la interpretación de los textos legales. Su no divulgación, explica el portal, hace que sea imposible para políticos, reguladores, organismos de supervisión no gubernamentales, partidos políticos de la oposición, empresas de servicios financieros, académicos y otros comentaristas entender el significado o aplicar el texto con confianza.