Richard Padula
vie, 24 oct 2014 20:43 CEST
Visto en : es.sott.net
Ocurrió hace 60 años en Florencia, Italia. Más de 10.000
fanáticos dicen haber visto platillos voladores arrojando una especie de pelusa
brillante. Los testigos que aún viven recuerdan lo que vieron.
Unos 10.000 fanáticos veían el encuentro en las gradas del
Estadio Artemi Franchi.
Hace 60 años un partido de fútbol se detuvo intempestivamente cuando varios
objetos voladores no identificados fueron vistos sobre un estadio de la ciudad
italiana de Florencia.
¿Llegaban extraterrestres a la Tierra? Y si no fue así ¿Qué fueron?
Ocurrió el 27 de octubre de 1954 en un típico día de otoño en la región de
Toscana. El poderoso club Fiorentina se enfrentaba a su rival local Pistoiese.
Unos 10.000 fanáticos veían el encuentro desde las gradas del Estadio Artemi
Franchi. Pero justo después de empezado el segundo tiempo, la cancha quedó en
silencio y segundos después la gente en la grada emitió un ruido como si
estuviera exaltada.
Los espectadores ya no veían el partido, sino hacia el cielo, señalando con sus
dedos. Los jugadores dejaron de correr y el balón rodó hasta detenerse.
El avistamiento paralizó el partido. |
Uno de los futbolistas era Ardico Magnini, una especie de
leyenda para el club que había jugado para Italia en el Mundial de ese año.
"Recuerdo todo de la A a la Z", asegura. "Era algo que lucía
como un huevo que se movía lentamente, lentamente, lentamente. Todos estaban
viendo hacia arriba y había algo brillante en el cielo, plateado
brillante".
"Estábamos impresionados, nunca habíamos visto algo así en el cielo. Nos
quedamos impactados".
Partido suspendido
El encuentro fue suspendido porque los espectadores vieron algo en el cielo,
decía el reporte que redactó el árbitro.
Entre los asistentes estaba Gigi Boni, un fanático del Fiorentina de toda la
vida. "Recuerdo claramente este avistamiento increíble", dice. Su
descripción de haber observado múltiples objetos difiere un poco de lo que vio
Magnini.
La Nazione reportó el hecho.
"Se movían muy rápido y luego se detuvieron. Todo duró un par de minutos. Podría describirlos como unos tabacos cubanos. Me recordaron a estos tabacos en la forma en que lucían".
Boni ha pasado muchos años reviviendo ese día en su mente.
"Creo que eran extraterrestres. Eso es lo que yo creo, no hay otra explicación
que pueda hacerme".
Otro de los jugadores, Romolo Tuci, cerca de sus 80 años, está de acuerdo.
"En esos años todos hablábamos de extraterrestres, de Ovnis y tuvimos una
experiencia, los vimos, los vimos directamente, de verdad".
El incidente en el estadio no puede ser interpretado como un caso de histeria
colectiva ya que hubo varios reportes de avistamientos de Ovnis en diferentes
pueblos de la Toscana durante los días que siguieron.
De acuerdo a algunos testigos oculares, un rayo de luz blanca fue visto en el
cielo proveniente de la localidad de Prato, en el norte de Florencia.
Otro hombre que no perdió la oportunidad de hablar sobre ese día es Roberto
Pinotti, presidente del Centro Nacional de Ovnis. Ha escrito muchos libros
sobre objetos voladores no identificados y su casa en el centro de Florencia
está llena de parafernalia relacionada con extraterrestres, carteles de viejas
películas B, artículos de periódicos enmarcados y fotos borrosas en blanco y
negro de platillos voladores.
"Tanto los jugadores como el público en las gradas quedaron impactados al ver estos objetos sobre el estadio", indica Pinotti.
"En esa época los diarios hablaban de marcianos. Claro, ahora sabemos que eso no es así, pero podríamos concluir que fue un fenónemo inteligente, un fenómeno tecnológico, un fenómeno que no podemos vincular a algo que sepamos que está en la Tierra".
También está intrigado por el material que cayó del cielo,
lo que Magnini describe como plateado y brilloso.
"Es un hecho que al mismo tiempo que los Ovnis eran vistos sobre Florencia, había una extraña sustancia pegajosa cayendo desde el cielo. En español lo llamamos 'cabello de ángel'", dice Pinotti.
"Se desintegraba"
"El único problema es que después de un corto periodo de tiempo se desintegraba".
A la edad de 10 años, fue testigo de este fenómeno. "Recuerdo, en un día
muy claro, ver los techos de las casas en Florencia cubiertos de esta sustancia
blanca por una hora, y como la nieve, se evaporó".
"Nadie sabe que relación tiene esta sustancia con los Ovnis".
Varios testigos lo describieron como algodón, la sustancia era difícil de
recolectar porque se desintegraba con el contacto, pero muchos intentaron
determinar qué era.
Uno de ellos fue el periodista del diario florentino La Nazione, el ya
fallecido Giorgio Batini. En 2003, señaló al programa de televisión italiano,
Voyager, cómo ese día recibió cientos de llamadas telefónicas sobre los
avistamientos.
Silvio Neri dibujó lo que vio ese día. |
Desde las oficinas de La Nazione, en el centro
de la ciudad, su propia visión del cielo estaba bloqueada por la Catedral, por
lo que decidió subir al techo del edificio del periódico para observar lo que
estaba viendo todo el mundo. El reportero de 81 años recuerda haber visto
"bolas brillantes" moviéndose rápido hacia el domo de la Catedral.
Batini salió a investigar. Se encontró con un trozo de madera fuera de la
ciudad cubierto con pelusa blanca. Recolectó varias muestras envolviéndolas en
un palillo de fósforo y las llevó al Instituto de Análisis Químico de la
Universidad de Florencia. Cuando llegó allí, encontró que otros habían hecho lo
mismo.
El laboratorio, manejado por el científico Giovanni Canneri, sometió al
material a un análisis espectográfico y concluyó que contenía los elementos
borón, silicona, calcio y magnesio. No era radiactivo, desafortunadamente, esto
no llevó a conclusiones definitivas y el material se destruyó en el proceso.
¿Pudo haber venido de un Ovni? "Es una idea absolutamente tonta. La
ciencia rechaza esa idea", dice el piloto de la Fuerza Aérea de EE.UU.
convertido en astrónomo, James McGaha.
El extraño "cabello de ángel".
Desde el Observatorio de Pastizales en el sureste de Arizona, McGaha ha
invertido más de 40.000 horas viendo el cielo nocturno, sin mencionar las horas
adicionales en la cabina de aviones caza.
"Todo el fenómeno de los Ovnis es un mito, magia, superstición envuelta en la idea de que los extraterrestres vienen para salvarnos o para destruirnos", asevera.
Desde el punto de vista de McGaha, el espectáculo completo,
el "cabello de ángel" y todo, no fue otra cosa que arañas migrando.
Las muestras de "cabello de ángel" fueron fotografiadas por la prensa de ese entonces. |
"Cuando vi ese caso originalmente pensé en que quizás fue una bola de fuego, un meteorito muy brillante entrando en la atmósfera. Pueden tener la forma de un tabaco rompiéndose en pedazos. Pero luce que se trató de algo causado por arañas jóvenes haciendo telarañas, telarañas muy finas".
"Las arañas usan estas redes como conductores, las conectan y al verlas en el cielo como globos básicamente es porque así se trasladan de un lugar a otro. Vuelan con el viento y estas bolas de telaraña han sido vistas a miles de metros del suelo, por lo que cuando el Sol las alumbra, brillan, ves toda clase de efectos visuales", agrega.
"Cuando esto se rompe y cae al suelo, parece magia, claro", dice McGaha. "Estoy seguro que eso fue lo que ocurrió ese día".
Migración de arañas
Esta teoría es apoyada por el hecho de que septiembre y octubre son los meses
cuando las arañas del hemisferio norte emigran, un hecho que aún genera
titulares en la prensa de hoy en día. Sin embargo, esto no convence a todos.
"Claro que sé de la hipótesis de la migración de arañas, pero no tiene sentido. Es una vieja historia estúpida", indica Pinotti.
Refuta la teoría de las arañas debido al análisis químico de
las muestras de "cabello de ángel". La seda de araña es proteína, un
compuesto orgánico que contiene nitrógeno, calcio, hidrógeno y oxígeno, no los
elementos encontrados en las muestras de Batini y otros que fueron llevadas a
la universidad.
Los futbolistas Ardico Magnini, Ronaldo Lomi y Romolo Tuci con uno de sus seguidores Gigi Boni (segundo a la izquierda). |
Luego de 60 años, la posibilidad de determinar las causas es
muy pequeña. "No confiaría en informes de un viejo y extraño evento como
éste a no ser que haya visto los datos", dice el escritor científico
Phillip Ball. Está de acuerdo en que los elementos que fueron observados en el
"cabello de ángel" no concuerdan con la teoría de las arañas.
"El magnesio y el calcio son elementos comunes de cuerpos vivientes, bóron y silicona no tanto, pero si estos fueran los elementos principales de la pelusa blanca, no me suena que vienen de arañas", asegura.
Esto significa que sigue el misterio. No importa lo que
digan los científicos, aquellos que estuvieron allí están convencidos de que lo
que vieron no tiene nada que ver con algo de este planeta.
Romolo Tuci sólo dice que se siente afortunado de haber estado allí. Sus ojos
muestran todavía exitación cuando recuerda ese curioso día. "Estaba
hechizado y también muy feliz".