Después de que el Reino Unido votara a favor de abandonar la
Unión Europea en junio, los movimientos populistas en toda la zona euro han
ganado, valga la redundancia, popularidad. Aunque no hay otros países
europeos con la intención de votar su salida de la UE, la fuerza del
populismo amenaza
un referéndum constitucional italiano que tendrá lugar este domingo ,4 de diciembre.
El referéndum de diciembre defendido por el actual primer
ministro, Matteo Renzi, busca reducir en gran medida el poder del Senado de la
nación, así como sus gobiernos regionales, por lo que el Ejecutivo sería significativamente
más potente. Renzi ha condicionado
su posición como primer ministro dependiendo del resultado de la consulta popular,
prometiendo renunciar si falla el referéndum. En su caso, que gane el No.
Sin embargo, Renzi no es el único que podría sufrir si
fracasa el referéndum. No uno, sino ocho de los bancos más grandes de
Italia " puede
nfallar " si los italianos votan en contra de la medida, de
acuerdo con los banqueros de alto nivel que hablaron con el Financial Times . Muchos
de los bancos más grandes de Italia están en crisis desde hace bastante tiempo
y en gran medida están considerados totalmente
insolventes ya que los bancos italianos, en general, mantienen una
morosidad de 360 mil millones de euros. Las manos de Renzi están atadas con
respecto a la forma de abordar la crisis gracias a las nuevas regulaciones
bancarias de la UE y desde entonces ha defendido una solución de "libre
mercado", que desgraciadamente se ha demostrado casi imposible debido a la
magnitud y la prevalencia de impagos entre los bancos italianos.
La única solución disponible para Italia bajo las
nuevas normas de la UE es un "bail-in." Un
"bail-in" es diferente de un "rescate" en el sentido de que
el dinero de los titulares de cuentas bancarias (es decir, personas regulares)
se quedan con la carga de mantener económicamente el colapso de los bancos,
mientras que si este apoyo financiero proviene de los gobiernos o instituciones
internacionales como el FMI sería un "rescate". Si el referéndum en
Italia el próximo domingo falla, un rescate en será la única solución Renzi
disponible si se ve obligado a renunciar. Con el
80% de la totalidad del dinero "bail-inable
(reductible o quitable)" en manos de los ahorradores y
pensionistas, un "bail-in" podría dar lugar a la agitación social
masiva en toda Italia cuando la mayoría de los ciudadanos despertaran para
encontrarse sus ahorros y cuentas bancarias drenados con el fin de apuntalar
los grandes bancos de la nación.
Como resultado, el
miedo se ha disparado a través del sector bancario italiano,
causando que el riesgo de la deuda italiana se dispare. Sin embargo, la
incertidumbre de los bancos italianos no es un fenómeno localizado, las
acciones bancarias europeas han
borrado ya todas sus ganancias después de un salto en los precios
de las acciones después de la elección presidencial en Estados Unidos. Los
inversores también están sacando su dinero fuera de Italia, que es también una
mala señal.
Al igual que otros bancos europeos, que también están en
crisis, en particular el enorme banco
Deutsche , los bancos italianos podrían ser la primera ficha de
dominó que cayera con consecuencias potencialmente globales. A pesar de la
ruina económica y la penumbra que precedió un exitoso "Brexit" y una
victoria Trump esta crisis no se ha materializado todavía. Italia está ya en una
crisis bancaria masiva - sólo un impacto en el sistema, no importa cuán
pequeño, podría llevar a ocho o más de sus bancos a estrelllarse.
Las encuestas muestran que el "no" es el
resultado más probable , en las próximas semanas podría comenzar
una crisis que se sienta en toda la zona euro y, tal vez, en el mundo.
Fuente: Activistpost