El último barometro
del CIS del mes de abril concede al PP una “estimación de voto
válido” del 34%; al PSOE del 28.2%; a IU del 9.9% y a UPyD del 7.4%. El “voto
directo en la encuesta” sobre el total, incluyéndose votos en blanco,
abstenciones, etc. es muy diferente: PP 12.5%; PSOE 13.7%; IU 7,1% y UPyD 4,1%.
Observamos que entre uno y otro el PP gana 22.5 puntos, el PSOE 14.5, IU 2.8 y
UPyD 3.3 puntos. Esta es la distancia antes y después de la cocina de
los resultados por el nuevo equipo que el PP nombró al entrar en el gobierno.
La cocina da
lugar a la “estimación del CIS” que luego publican los mass media, y se basa en
cálculos de este organismo dependiente del Ministerio de la Presidencia, cálculos
que nunca se han hecho públicos y han cambiado con los
distintos equipos de dirección de este organismo, tal y cómo el mismo CIS reconoce en su web
Veamos ahora una comparativa del
CIS de julio de 2012 con el de abril de 2013
Lo que salta a la vista es que,
mientras el voto directo al bipartidismo se derrumba en los
últimos 9 meses, la estimación se mantiene casi igual en ambas
tablas. En julio de 2012, un voto directo de casi 6 puntos más para el PP
arrojaba sólo +2,6% de estimación de voto, o lo que es lo mismo, mientras ahora
el PP gana 22.5 puntos tras la cocina, en julio de 2012 la diferencia entre las
dos variables era de 18.4 puntos. El PSOE, que supera al PP en voto directo, se
queda 6.7 puntos por debajo del PP, mientras que IU y UPyD ganan sólo 2.8 y 3.3
puntos. De estos porcentajes podría deducirse que el método ha cambiado este
último año, y que el peso de la pregunta “¿Y podría decirme a qué partido
o coalición votó?” [en las últimas elecciones generales] (24a) ha
crecido significativamente en el cálculo.
Los resultados de esta última
encuesta varían significativamente respecto a los ofrecidos por otras encuestadoras,
como Metroscopia (abril): PP 24.5%; PSOE 23%; IU 15.6%;
UPyD 13.7%, donde sí se observa el descalabro del bipartidismo. En el caso
del PP hay una diferencia de 10,5 puntos entre ambas encuestas del pasado mes
de abril. En lanoticia de El País relativa al último estudio del CIS,
cabe reseñar que aunque en un párrafo se diga que “con las correcciones
introducidas IU obtiene el 9,9% de los votos, seguida de UPyD con el 7,4%.
Estos últimos datos son muy similares a los que IU y UPyD obtienen en otros
estudios demoscópicos, también en los realizados por Metroscopia para EL PAÍS“,
esto no es cierto. 9,9% para IU no es “un dato muy similar” a 15,6%. 7,4%
tampoco se parece mucho a 13,7% en el caso de UPyD.
Con esta diferencia tan
sustancial entre el CIS y el resto de sondeos o encuestas deberíamos
preguntarnos por la actual fiabilidad del Centro de Investigaciones
Sociológicas, al menos desde que los cálculos los lleva a cabo el equipo
nombrado por el gobierno del PP. Algunas muestras significativas de cómo el CIS
ha errado a la baja en sus previsiones particularmente con IU desde
que nuevo equipo tomó el mando las encontramos en las últimas elecciones
gallegas o andaluzas.
- El 5 de octubre de 2012 el CIS
publicaba la última encuesta antes del proceso electoral, otorgando a AGE
(Esquerda Unida y el partido del exlíder del Bloque Xosé Manuel Beiras) un 4,6% de estimación de voto y 1 escaño. 17 días después, AGE
conseguía un 13,99% de voto y 9 escaños, quedándose a poco más de 6
puntos del PSdeG.
- En Andalucía, la estimación de
voto para IU
fue del 9,8% y el resultado del 25 de marzo de 2012 11,34%, y 3 escaños más. Metroscopia erró aún más en esa
ocasión. Además de dejar a IU estancada en el 8,8%, otorgó al PP la mayoría absoluta con 59 escaños por 41 de PSOE
y 9 de IU: “El descalabro del PSOE otorga al PP mayoría absoluta en
Andalucía” fue la portada de El País a una semana de las elecciones en
esa comunidad. Metroscopia concedió al PP 59 escaños y el CIS 54-55, pero sólo
una semana después obtuvo 50.
- En Catalunya, el CIS publicó el
8 de noviembre que CIU obtendría 63-64 escaños, pero el 25 de ese mes
consiguió 50. Otra vez, los partidos más a la izquierda
obtuvieron más de lo que decía el CIS: 11 para ICV-EUIA y 17 para ERC en el
sondeo crecieron después a 13 y 21 respectivamente.
- En la reciente encuesta de
finales de abril, leemos una noticia de El País donde se dice
que Uno de cada tres catalanes apuesta por una Cataluña
independiente, según el CIS. “El Centro de Investigaciones
Sociológicas revela que el 33,7% de ciudadanos quiere separarse de España”
(subtítulo). El diario recoge la distancia entre el porcentaje ofrecido por el
CIS y el de la encuestadora de la Generalitat de Catalunya (CEO).
“Los resultados que arroja el
estudio del CIS no coinciden precisamente con los del Centro de Estudios de
Opinión (CEO) en su última ola realizada entre el 4 y el 14 de febrero. Según
el informe de la Generalitat, el 46,4% de catalanes prefieren un Estado
independiente“.
Sin embargo, la diferencia que aparece
en la encuesta es aún mayor que el 46,4% que apunta El País, que prefiere
ofrecer el porcentaje extraido de una cuestión entre diferentes opciones que el
de la pregunta más directa, en la que el sondeo alcanza el 54,7% a favor de la independencia,
más de 20 puntos de diferencia con el CIS sólo tres meses antes.
Sin embargo, la diferencia que aparece
en la encuesta es aún mayor que el 46,4% que apunta El País, que prefiere
ofrecer el porcentaje extraido de una cuestión entre diferentes opciones que el
de la pregunta más directa, en la que el sondeo alcanza el 54,7% a favor de la independencia,
más de 20 puntos de diferencia con el CIS sólo tres meses antes.
Creo que todas estas
observaciones y comparativas entre las encuestas publicadas por el CIS desde
principios de 2012 y el resultado real debería llevarnos a pensar que las
correcciones que realiza este organismo distorsionan más que corrigen la
opinión real de la calle.