Foto:Kremlin.ru |
El discurso de Putin en la conferencia del Club Valdai en
Sochi la semana pasada está recibiendo una gran cantidad de cobertura, tanto en
el ámbito de noticias alternativas como en la guarida de la mentira rusofoba - los
medios de comunicación occidentales prostituidos a las corporaciones. Y por una
buena razón. El evento estaba dedicado este año al papel de Rusia en el orden
mundial post guerra fría. Este año reunió
a los mejores expertos sobre Rusia en el mundo para debatir las necesidades
cambiantes del sistema de la seguridad global. Durante un período de tres días,
los participantes discutieron cuestiones clave relacionadas con el futuro papel
de Rusia en esta arquitectura global. El último día del evento culminó con la aparición del presidente Putin –
discurso que muchos medios occidentales de inmediato criticaron
como de “anti-estadounidense” - que reiteró muchas de las mismas preocupaciones
que originariamente mencionara en su discurso en la Conferencia de Seguridad de
Munich en 2007.
La mayoría de las personas en los lugares de habla Inglesa
del mundo se perdieron el discurso de Putin en la conferencia del Club Valdai
en Sochi hace unos días, y, lo más probable es que aquellos de nosotros que han
oído hablar del discurso no tuvimos la oportunidad de leerlo, y no nos hemos
percatado de su importancia. Los medios de comunicación occidentales hicieron
todo lo posible para ignorarlo o torcer su significado. Independientemente de
lo que usted piense de Putin este es probablemente el discurso político más
importante desde el discurso del 5 de marzo de Churchill de 1946 (“Iron Curtain”).
En este discurso, Putin cambió abruptamente las reglas del
juego. Anteriormente, el juego de la política internacional se jugaba de la
siguiente manera: los políticos hacían declaraciones públicas, en aras de
mantener una ficción agradable de la soberanía nacional, pero eran
estrictamente para cara al público y no tenía nada que ver con la verdadera
esencia de la política internacional porque entre tanto, ellos participaban en
negociaciones secretas a puertas cerradas, en las que las distintas ofertas se
elaboraban. Anteriormente, Putin trató de jugar a este juego, esperando sólo
que Rusia fuera tratada como un igual. Pero estas esperanzas se han
desvanecido, y en esta conferencia, declaró que el juego había acabado,
violando de manera explícita el tabú occidental hablando directamente con la
gente saltándose a los jefes de los clanes de la élite y líderes políticos.
El blogero ruso Chipstone resumió los
puntos más destacados del discurso de Putin de la siguiente manera:
1. Rusia dejará de
jugar y participar en negociaciones poco serias a puertas cerradas. Sin
embargo, Rusia está abierta a conversaciones y acuerdos serios, si éstas son
conducentes a la seguridad colectiva, se basan en la equidad y tienen en cuenta
los intereses de cada lado.
2. Todos los sistemas
de seguridad colectivos mundiales ahora yacen en ruinas. Ya no hay ninguna
garantía de seguridad internacional en absoluto. Y la entidad que los destruyó
tiene un nombre: Los Estados Unidos de América.
3. Los constructores
del Nuevo Orden Mundial han fracasado, después de haber construido un castillo
de arena. Sea o no un nuevo orden mundial de cualquier tipo que se vaya a
construir no es decisión solo de Rusia, pero es una decisión que no se hará sin
Rusia.
4. Rusia está a favor de un enfoque conservador a la
introducción de innovaciones en el orden social, pero no se opone a la
investigación y discusión de tales innovaciones, para ver si la introducción de
cualquiera de ellos podría estar justificado.
5. Rusia no tiene la
intención de ir a pescar en las aguas turbias creadas por el siempre en
expansión, “imperio del caos” de América, y no tiene ningún interés en la
construcción de su propio nuevo imperio (esto es innecesario; los desafíos de
Rusia se encuentran en el desarrollo de su ya vasto territorio). Tampoco Rusia está dispuesta a actuar como un
salvador del mundo, como lo había hecho en el pasado.
6. Rusia no intentará volver a formatear el mundo a su
propia imagen, pero tampoco le permitirá
a nadie que reformatee su imagen. Rusia no se cerrará en sí misma del resto
del mundo, pero cualquier persona que intente cerrarla, apartándola del mundo que
esté seguro de estar cosechando un torbellino.
7. Rusia no desea que el caos se extienda, no quiere la
guerra, y no tiene intención de iniciar una. Sin embargo, hoy en día Rusia ve
el estallido de la guerra mundial como casi inevitable, se ha estado preparado
para ella y continúa preparándose para ella.
Rusia no hace la guerra - pero tampoco la teme.
8. Rusia no tiene intención de tomar un papel activo en
frustrar a aquellos que todavía están tratando de construir su Nuevo Orden
Mundial - hasta que sus esfuerzos
empiecen a afectar a los intereses fundamentales de Rusia. Pero aquellos que
logren arrastrar a Rusia en este proceso, a través del desprecio para lograr
sus intereses, aprenderán el verdadero significado del dolor.
9. En su política exterior y, más aún, en la política interna,
el poder de Rusia no se basa en las élites y su tráfico de “puertas para
adentro”, sino en la voluntad del pueblo.
A estos nueve puntos que me gustaría añadir una décimo:
10. No existe todavía una oportunidad para construir un
nuevo orden mundial que evite una guerra mundial. Este nuevo orden mundial de
obligada necesidad incluyen a los Estados Unidos - pero sólo puede hacerlo en las mismas condiciones que todos los demás:
con sujeción a la ley internacional y los acuerdos internacionales; absteniéndose
de toda acción unilateral; en el pleno respeto de la soberanía de otras
naciones.