Hoy en día, diríamos que se trata de una maquiavélica falsa
bandera, quizás la peor de todas las que hemos tenido la ocasión de aprender
hasta la fecha. Todos los componentes de la gran hambruna de 1932-33 se conocen
y son enumerados en los libros de historia, sin embargo, pueden estar
distorsionados en tanto en cuando se omiten ciertas circunstancias. Oficialmente,
quien organizó el desastre no dudó en crear una crisis en su sistema, un
colapso en su economía y la muerte de millones de sus conciudadanos para lograr
sus fines. Hay un extraño parecido a lo que sucede hoy con Rusia. Los que creen
que las dificultades a las que se enfrentan las empresas occidentales debido al
impacto de las sanciones anti-rusas, lo mejor sería es parar esta escalada de
hostilidades, se equivocan lamentablemente. Posiblemente, la maquinaria podría
ir en buen camino, como en 1933.
La teoría Holodomor (hambruna en ucraniano) surge en los medios de comunicación cada
vez que Ucrania está dispuesta a acercarse a Rusia. Sólo para recordar a
aquellos que no conozcan esta tragedia, en 1932-1933 hubo una gran hambruna en
la URSS que tomó un número sin precedentes de vidas (hasta 7 millones de
víctimas de acuerdo con algunas estimaciones). Paradójicamente, la hambruna
esencialmente tocó a las regiones más fértiles, como el Cáucaso del Norte, la
cuenca del Volga, los Urales del Sur, Siberia Occidental, Ucrania, Bielorrusia
y Kazajstán. Durante la última década, muchos historiadores occidentales fueron
contratados para desarrollar la teoría de que este genocidio fue orquestado por
el gobierno de Stalin contra los ucranianos. Considere los hechos históricos y
trate de estar más cerca de la verdad sobre las causas y circunstancias de esta
horrible hambruna en la URSS.
En primer lugar, tenemos que centrarnos en el oro, que
sorprendentemente no siempre es el medio de pago ...
A principios de la década de 1920, la proclamada Unión
Soviética simplemente estaba interesada en la restauración de su industria
completamente destruida después de la Primera Guerra Mundial y la Guerra Civil
en Rusia (1918-1921). Los soviéticos necesitaban desesperadamente maquinaria y
equipo industrial moderno. ¿Cómo podrían ellos darse este lujo? El gobierno
soviético era capaz de ofrecer al mercado internacional tres cosas: cereales,
minerales y oro.
En la Conferencia de Génova, en 1922 se introdujo el intercambio
estándar de oro o intercambio
de oro francés estándar. Desde finales de 1922, la Unión Soviética emitió
la chervonets de oro - una nueva moneda soviética cuya
producción entera fue proporcionada por las reservas de oro y era convertible
en oro. En 1923, el chervonet Soviético era una de las
monedas del mundo más estable y más segura. Esto representaba un peligro claro
y presente para el epicentro financiero emergente - los Estados Unidos de
América. Como resultado de la Primera Guerra Mundial, el peso económico y
financiero de los Estados Unidos explotó sorprendentemente. Este país fue
uno de los pocos beneficiarios de la masacre humana que ocurrió en Europa. Sin
embargo, surgió con fuerza un rival inesperado, el partido bolchevique.
En 1924, el chervonet Soviético fue reemplazado
por un rublo más débil, que no tenía equivalente en oro. La amenaza para
el dólar y la libra esterlina disminuyó. A cambio, la Unión Soviética fue
reconocida por el Reino Unido, Francia, Noruega, Austria, Grecia, Suecia,
Dinamarca, China, Japón, México y otros países. Por aquel entonces, los
Estados Unidos tenían el 46% de las reservas de oro del mundo capitalista.
En 1925, la dirección soviética decidió acelerar la industrialización
del país. Sorprendentemente, y a pesar de la gran promesa de ganancias
económicas con tal política, los países occidentales se negaron a
recibir oro como pago en todas las transacciones con la Unión Soviética. Este
comportamiento increíble es conocido históricamente como " el bloqueo del
oro". La URSS podía pagar por máquinas y otros equipos únicamente con
aceite, madera y cereales. (Es interesante notar que aceptaban incluso las monedas de oro de la Rusia imperial
pre-revolucionaria - la moneda de un país que ya no existía era inofensiva).
En 1929, los banqueros norteamericanos causaron la Gran
Depresión. Se completó el corto período de estabilidad del sistema
monetario internacional.
En 1931, Alemania y Austria no habían podido pagar su deuda
externa y dejaron el patrón oro, terminando el Gold Standard Exchange. En
el otoño de 1931, el Reino Unido también paró la conversión en oro.
Como se puede ver, sería lógico y natural levantar el bloqueo del oro de la Unión
Soviética en ese momento, permitiendo que el oro soviético aliviara la economía
occidental. Pero la decisión que fue tomada era absurda e impactante. No
sólo continuaron con el embargo de oro, sino que impusieron un estricto embargo
comercial en el grueso de las exportaciones soviéticas, a pesar de la severa
crisis económica occidental, cuando la mayoría de los productores estaban
interesados en recibir solicitudes, especialmente aquellas que eran pagadas
en oro, madera, petróleo u otras materias primas de la Unión Soviética. Por
ejemplo, en 1932, el 80% de la exportación de maquinaria británica fue a la
URSS. Sin embargo, el 17 de abril de 1933, el gobierno británico decidió
un embargo a la importación de mercancías rusas. ¿Cuál fue la lógica de
esa decisión? Fue una decisión política para ejercer presión sobre el
gobierno soviético dirigido por la ideología tenaz y antagonista a la
estructura económica en vigor.
¿El comercio entre Occidente y la Unión Soviética terminó? Absolutamente
no. La demanda soviética de tecnología y maquinaria occidental fue mayor
que nunca: la industrialización estaba en su auge. Pero ahora Occidente
aceptaría sólo un método de pago: El Grano Soviético. (La extrañeza de
esta solicitud se explica por el hecho de que en ese momento las monedas de la
mayoría de los países agrarios fueron fuertemente devaluadas y la demanda de
cereales en el mercado mundial se redujo en un 50-70%!).
El gobierno de Stalin se enfrentó a una elección: o
renunciaba a restaurar la industria y por lo tanto capitular a Occidente, o
continuar industrializándose, llevando a su país a una terrible crisis interna Si
los bolcheviques se hacían cargo de las producciones de cereales, había una
alta probabilidad de hambre, que a su vez podría conducir a la inestabilidad
interna y la caída del régimen. Así que lo que eligiera lo que eligiera Stalin,
Occidente tenía grandes probabilidades de salir victorioso. Stalin y su
séquito decidieron entonces continuar con la industrialización y no se detendrían
ante nada. (Bueno, todos sabemos cómo se las gastaba Stalin).
El gobierno envió los cereales a Occidente, no para matar
de hambre a parte de la población, sino porque no había otra manera de pagar
por el suministro de equipos. Todas las esperanzas de Stalin sobre la
base de la próxima cosecha resultaron pequeñas. El país se vio afectado por la
sequía. La URSS no pudo comprar alimentos a cambio de oro (bloqueo de oro)
o dinero (no había a causa del embargo). Se hicieron esfuerzos para
recibir el grano de Persia que había aceptado el oro. Sin embargo, las
autoridades no llegaron a tiempo y la catástrofe ya había comenzado.
Entre 1932 y 1933, miles y miles de personas perdieron la
vida y fue sólo después de esto que Occidente aceptó de nuevo el petróleo, la
madera y los metales preciosos a los soviéticos.
En octubre de 2008, el Parlamento Europeo reconoció el
Holodomor en Ucrania como un crimen contra la humanidad. El culpable designado,
la "URSS de Stalin". Sin embargo, el informe del Parlamento
Europeo no ha respondido a dos preguntas:
- ¿Por
qué los capitalistas tuvieron ese comportamiento tan “extraño" negando
el oro de Stalin?
- ¿Por
qué se les pidió que se pagase en grano?
Lo cierto es que en 1934, la exportación de grano de la URSS
cesó por completo. Por orden del gobierno soviético ...
La hambruna de 1932-1933, que fue organizado
cuidadosamente por el Oeste, pero no tuvo el efecto deseado: los bolcheviques
se mantuvieron en el poder. Continuaron industrializarse. Las
medidas económicas fueron ineficaces - Stalin restauró el país a cualquier
precio. Sólo las medidas militares permanecieron. Y, exactamente en
1933, Adolf Hitler, que abiertamente escribió su deseo de expansión hacia las
vastas llanuras de Rusia, llegó al poder en Alemania.
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